“Ayer (por el viernes) conocimos el auto de vista que confirma en todos sus extremos la sentencia que dictó la doctora Jacqueline Rada, que determinó a partir de todos los elementos aportados en el proceso por los abogados y apoderados del presidente Evo Morales la inexistencia física comprobada del supuesto menor”, señaló.
La supuesta existencia de un hijo en común entre el Jefe de Estado y Gabriela Zapata, según Arce, fue “una mentira fabricada con fines políticos”.
“Hubo una mentira sostenida porque se evidenció en las investigaciones que actores políticos habrían participado directamente en convivencia con la señora Zapata, para inventar una serie de historias, mentiras y falacias que fueron puestas en evidencia, a 20 días de un referendo de reforma constitucional vinculado a Evo Morales y Álvaro García Linera”, explicó.
El objetivo de esta mentira, según su análisis, fue contrario a la democracia, ya que pretendía generar un escándalo que no existía para inducir en errores al pueblo boliviano a menos de tres semanas de emitir su voto.
“La sentencia ha confirmado plenamente esta situación y se ha evidenciado la verdad absoluta de los hechos”, manifestó el procurador, y añadió que todo el pueblo boliviano en su conjunto ha sido engañado y sometido a una mentira.
“Se dijo que había un hijo (entre Zapata y el Presidente), que hubo tráfico de influencias y una serie de circunstancias, cuando la realidad es que no existió ese hijo y eso lo determinó una autoridad judicial con todo el peso que tiene y la evidencia fue mostrada durante todo el proceso que duró varios meses”, reiteró el Procurador.
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